quimitube en twitterquimitube en facebookquimitube en googleplusquimitube en youtube

¿Por qué no se deben mezclar el salfumán y la lejía?

Escrito por Quimitube el 19 septiembre


En esta entrada vamos a hablar de una reacción química que puede ocurrir de forma cotidiana y con sustancias que tenemos habitualmente en casa, a pesar de que es muy peligrosa. Es posible que hayáis oído en múltiples ocasiones la advertencia de: «nunca mezclar lejía con salfumán«. Se suele repetir en a menudo durante los cursos de prevención de riesgos laborales para puestos de trabajos que manejan productos de limpieza, y también viene indicado en la etiqueta de estas sustancias.

Aquí vemos las indicaciones de precaución que aparecen en una botella de salfumán:

Etiqueta advertencia botella salfumán: ácido clorhídrico diluido

 

Y aquí las indicaciones de precaución que aparecen en una botella de lejía:

Etiqueta con advertencias de una botella de lejía: hipoclorito sódico

En efecto, vemos que en la etiqueta del salfumán se indica específicamente que no debe mezclarse con lejía ni con amoníaco porque se pueden producir gases peligrosos. Asimismo, en la etiqueta de la lejía, se indica que no debe mezclarse con ácidos. El salfumán es un ácido fuerte, concretamente se trata de ácido clorhídrico, HCl, con una concentración que suele oscilar entre el 16 y el 20%. Es por este motivo, porque el salfumán es un ácido, que no se puede mezclar con la lejía, ya que en medio ácido se puede producir una reacción química en la que se libera cloro gaseoso.

La mezcla de lejía con salfumán produce gas cloro, sumamente tóxico y peligroso.

¿Cuál es esta reacción? Bueno, la lejía es una disolución diluida (en torno al 5%) de hipoclorito sódico, NaClO. Los aniones hipoclorito, ClO, junto con los aniones cloruro, Cl, sufren la siguiente reacción en medio ácido:

Reacción química de formación de cloro gaseoso por mezcla de lejía y salfumán

, liberando cloro y formando agua. Vemos que se trata de un equilibrio químico; según el principio de Le Châtelier, el aumento de la concentración de protones (es decir, la disminución del pH) favorece el desplazamiento del equilibrio hacia la derecha y por tanto la liberación de gas cloro. Puesto que el salfumán es una disolución al 20% de HCl tendrá un pH bastante bajo, lo cual favorecerá la formación del peligroso compuesto que, además, se desprenderá a la atmósfera, continuando así con el desplazamiento del equilibrio de forma constante. Esto hace que la liberación de Cl2 en la reacción sea bastante rápida.

En concreto, se trata de una reacción de oxidación-reducción, ya que hay cambio en los números de oxidación de los compuestos que intervienen.

El cloro del hipoclorito pasa de un estado de oxidación +1 a un estado de oxidación 0 en el Cl2. Esto significa que se ha reducido, actuando como oxidante, porque su estado de oxidación disminuye.

Semirreacción de reducción en la reacción de lejía y salfumán: reducción del hipoclorito

Por su parte, el cloro del cloruro, Cl, pasa de un estado de oxidación -1 a un estado de oxidación 0 en el Cl2. Esto significa que se ha oxidado, actuando como reductor, porque su estado de oxidación aumenta.

Semirreacción de oxidación en la reacción de lejía y salfumán: oxidación del cloruro

El cloro diatómico producido, Cl2, es un compuesto sumamente tóxico que puede llegar a producir la muerte (puedes ver un ejemplo de sus terribles consecuencias aquí, y más información sobre su toxicidad, efectos y precaución de manejo aquí). De hecho, ha sido incluso usado como arma química en algunas guerras a lo largo de la historia.

Para mostrar esta reacción química de una forma más visual, os dejamos con este vídeo sobre la misma (está en catalán, pero subtitulado en castellano para quien no lo entienda). Resulta muy interesante, ya que utilizan el gas cloro producido en la reacción de lejía con salfumán para decolorar una flor (y dejarla un poquito chuchurrida, la pobre):

También te puede interesar:

Salvando a los crash test dummies: la química del airbag

¿En qué se diferencian la gasolina 95 de la 98?

¿Qué cantidad de almendras amargas hay que ingerir para morir envenenado?

Atracones navideños: una ayuda química para la acidez estomacal.

Q-Blog , ,

9 Comentarios

  1. Información Bitacoras.com…

    Valora en Bitacoras.com: En esta entrada vamos a hablar de una reacción química que puede ocurrir de forma cotidiana y con sustancias que tenemos habitualmente en casa, a pesar de que es muy peligrosa. Es posible que hayáis oído en múltiples ocasione…..

    Bitacoras.com, 10 Años Antes Responder

  2. […] En esta entrada explicaremos la peligrosa reacción química que se produce cuando se mezclan lejía y salfumán con liberación de cloro.  […]

    ¿Por qué no se debe mezclar la le..., 10 Años Antes Responder

  3. […] ¿Por qué no se deben mezclar el salfumán y la lejía? […]

    Lo Mejor de la Semana (15-21 de septiembre) | Hablando de Ciencia | Artículos, 10 Años Antes Responder

  4. Hummm… se me están ocurriendo ideas malvadas… En el tío Tungsteno, Sacks mezcla cloro y sodio para obtener sal común. Ya sé cómo obtener cloro, como consiga el sodio… xDDD no me hagas caso (no me denuncies antes de tiempo, que aún no he hecho nada malo xDD)

    ununcuadio, 10 Años Antes Responder

    • Jajajaja, no, no, no te denunciaré… ¿Y para qué quieres fabricar sal casera?

      QuimiTube, 10 Años Antes Responder

  5. ¡Muy interesante! Se lo pondré de ejemplo a mis alumnos para que eviten accidentes domésticos en casa

    Irene, 10 Años Antes Responder

    • Cuando yo era alumna, en cierta ocasión, ya tuvimos un percance en la universidad con esto 🙂 Un saludo grande.

      QuimiTube, 9 Años Antes Responder

  6. Aunque lo fundamental del artículo es que se produce cloro…. ¿qué pasa con el Na+? ¿Reacciona con el H2O para formar NaOH? ¿Y éste a su vez reaccionarío con parte del HCl para formar NaCl + H2O?

    PGB, 9 Años Antes Responder

    • ¡Hola! No reacciona (el Na+ no es un buen oxidante y menos un reductor) queda simplemente disuelto en la disolución.

      QuimiTube, 9 Años Antes Responder


Escribe un comentario